El pasado martes se reunió la Comisión Paritaria Nivel General de las y los trabajadores universitarios de las Universidades Nacionales.
Con la participación del Ministro de Educación, el Secretario de Políticas Universitarias, la Presidenta y el Vicepresidente del CIN y Rectores de Universidades Nacionales, se planteó en paritarias una línea de crédito promocional en el Banco de la Nación Argentina, para adquirir equipos de computación, la que comenzaría a hacerse efectiva a partir de la segunda mitad del mes de octubre.
El Secretario General de FATUN, Walter Merkis, manifestó que «esta operatoria, debía ser considerada como particular y dedicada a las familias de las/os Nodocentes que lo tomaran, y no como aporte para la provisión de elementos necesarios para la realización de las tareas remotas que que están llevando a cabo los y las Nodocentes para mantener el sistema universitario de pie ante la pandemia, toda vez que las Universidades Nacionales siguen en falta no solo con la provisión de equipos para el trabajo remoto sino también con el reconocimiento que deben brindar a las/os que están usando sus propios equipos, consumos de energía y la conectividad para llevar a cabo tales tareas«.
Asimismo desde la Federación que nuclea al personal universitario se planteó la necesidad de un acuerdo salarial para equilibrar la pérdida del poder adquisitivo, «situación a la que paciente y esforzadamente venimos aportando desde junio de este año en que termino nuestro acuerdo paritario, nosotros ofrecimos esta espera y a esta fecha sin recibir oferta alguna, la situación se agrava, como así también distintas cuestiones que se hallan pendientes de resolución como las modificaciones al Convenio Colectivo de Trabajo, ya acordadas en las Paritarias y el urgente tratamiento de las mejoras solicitadas para el agrupamiento Asistencial», remarcaron.
Finalmente destacaron que «somos conscientes de la grave situación por la que atraviesa nuestro país y en ese sentido venimos contribuyendo con nuestro máximo esfuerzo y dedicación para superarla, pero al mismo tiempo necesitamos que las autoridades escuchen nuestras necesidades, en el ámbito de negociación y consenso que históricamente hemos integrado con nuestra contraparte, lo que, con absoluta certeza, ha de permitir llegar a acuerdos que satisfagan las necesidades de ambas partes».