En Trama Educativa Radio conversamos con Abigail Araujo, vicepresidenta del Consejo Escolar del Partido de General Pueyrredon. Analizamos la actualidad de la educación en el distrito, los principales inconvenientes que afronta el sistema educativo local y la importancia del Servicio Alimentario Escolar (SAE).
Las jornadas dobles
– Estuvo en Mar del Plata el director general de Cultura y Educación de la Provincia de Buenos Aires, Alberto Sileoni. Presentó las jornadas dobles para algunas instituciones educativas provinciales.
Tres escuelas primarias de nuestro distrito: La Escuela Primaria N°79 -anfitriona del anuncio de Sileoni-, la N°17 y la N° 44, van a ser de doble jornada. Lo recibimos con mucha alegría porque en esas instituciones se había solicitado esta modalidad por la realidad social de la comunidad educativa.
– La Escuela Primaria N°44 está ubicada cerca del predio de disposición final de residuos.
Así es. Raúl Calamante, del Ministerio de Trabajo, destacaba que no es solo una medida educativa sino que sirve para evitar el trabajo infantil porque lo que sucede en esa zona es que cuando los chicos no tienen una actividad a contra turno terminan haciendo tareas en ese espacio. Entonces poder ampliar el espacio pedagógico es sumamente importante.
– ¿Cuáles son las necesidades por las que se implementan estas dobles jornadas?
Además de lo que mencionábamos de la N°44, en la N°17, que está en el camino viejo a Miaramar, por ejemplo la directora explicaba que los chicos vienen desde muy lejos. Son pocos alumnos pero todos recorren grandes distancias. Entonces, el tiempo que les insume el viaje no les permite hacer otro tipo de actividades en otros espacios. Poder desarrollar más actividades educativas en la escuela es importante. Y sucede en la Escuela Primaria N°79, ubicada en el Barrio 2 de abril, que también había una demanda para más tiempo en la escuela. Creemos que va a generar un aumento de matrícula.
– ¿Tienen pensado ampliar estás jornadas dobles a otras instituciones?
Lo que anunció Alberto Sileoni es que en esta etapa, antes de las vacaciones, hay 26 escuelas de la provincia que van a pasar a tener doble jornada pero después de las vacaciones de invierno serán 100 instituciones. La idea es empezar a cumplir con la Ley de Educación que indica que tiene que haber una cantidad de establecimientos con doble turno para responder a las necesidades. Lo que sucede en el sur de la ciudad es que el crecimiento poblacional que ha tenido esa zona es difícil dar respuestas con la cantidad de aulas. De todos modos, en la zona norte también sucede lo mismo desde hace un par de años aunque tal vez no tiene tanta notoriedad pública.
Las problemáticas de las escuelas provinciales de la ciudad
https://tramaeducativa.ar/?p=11794– Respecto a la zona sur había tres instituciones con problemas de agua, la Escuela Primaria n°24, la EES n°71 y el Jardín n°921, ¿se solucionó este inconveniente?
En este momento las tres escuelas están con clases y con agua. La situación de la bomba fue lamentable pero es una solución provisoria a un problema que se está solucionando con una obra que está ejecutando el Consejo Escolar con presupuesto de la Provincia de Buenos Aires para generar una solución definitiva a la falta de agua. Se está haciendo un tanque.
– Estás a cargo de la Comisión de Servicio Alimentario Escolar (SAE). ¿Qué ha cambiado después de la pandemia con la vuelta a la presencialidad?
Desde la vuelta a la presencialidad en agosto de 2021 se empezó a preparar la vuelta de los comedores, que en nuestro distrito ocurrió en noviembre de ese año. El Ministerio de Desarrollo de la Comunidad, quien articula el SAE, tomó la decisión de continuar con los comedores como con el módulo alimentario -conocido como bolsón-. Hace poco tiempo, el gobernador Kicillof, el ministro Larroque y Sileoni anunciaron que esta política de módulo alimentario se institucionalizaba con el nombre de Programa Mesa. Con lo cual estamos recibiendo en el último tiempo algunas novedades de cómo va a continuar. La realidad en General Pueyrredon es que, además de los más de 56.000 chicos que desayunan y meriendan, de los casi 18000 chicos que almuerzan en las escuelas provinciales del distrito, se agrega el reparto de casi 52.200 bolsones mensuales a los cuales se les subió el presupuesto en el mes de mayo.
– ¿Por qué se siguen implementando estas políticas alimentarias desde hace más de 20 años en la Provincia de Buenos Aires?
Lo interesante que tiene el SAE como programa es que viró sus objetivos a ser una herramienta en lo que hace a formación en nutrición y en soberanía alimentaria. La realidad es que los países desarrollados del mundo tienen comida en las escuelas. A veces no tiene que ver con la necesidad si no con una educación. Nosotros en el distritos entregamos en el bolsón tanto conservas de pescado como lo tenemos incorporado en el menú escolar. Hay muchas casas de nuestro distrito que no comen pescado siendo que somos el puerto pesquero más importante del país. El Programa Mesa también tiene la idea, no solo de generar un ámbito de equidad para que se pueda dar la continuidad educativa sino también formar en aspectos de alimentación saludable.
– Hay muchas problemáticas en la comunidad educativa en general, por ejemplo el reclamo de las instituciones de Chapadmalal que hablábamos antes. ¿El Consejo Escolar está llegando tarde con las soluciones, son demasiados los problemas o se vienen arrastrando desde hace mucho tiempo?
Por un lado hay un serie de problemas estructurales que tenemos en las escuelas de General Pueyrredon que tienen que ver con tiempos donde no hubo inversión. Esa infraestructura cuando no tiene mantenimiento se deteriora. Por otro lado, en algunas instituciones hubo un crecimiento muy grande la matrícula que generó la necesidad de otras soluciones. Por ejemplo, el servicio alimentario escolar ha duplicado y hasta triplicado los cupos, eso genera nuevas problemáticas. Hay que repensar cuál es la situación de las cocinas: qué equipamiento tenemos, con qué utencillos contamos. cuántos auxiliares necesito. En infraestructura pasa un poco eso.
– ¿Cuál es el tema más urgente que tienen para resolver el Consejo Escolar teniendo en cuenta todas las comisiones?
Infraestructura es siempre nuestra urgencia porque sin edificios no podemos avanzar. Estamos trabajando para pedir la cantidad de personal necesario para las escuelas, como auxiliares de cocina por ejemplo. Creo que otro tema prioritario es que este año vamos a volver a licitar el servicio alimentario escolar, en particular lo que se da en las escuelas -desayuno y comedor-. Tenemos que pensar en conjunto el pliego que luego irá a una audiencia pública para licitar. Eso es importante porque en este momento ejecutamos $240 millones en bolsones en el distrito y $101 millones en comedor y desayuno en las escuelas. Entonces estamos hablando de grandes cantidades que queremos que lleguen con la mejor calidad posible.
Las relaciones políticas locales
– ¿Cómo viene la relación entre los y las consejeros escolares?
Debo decir que en este momento todas las áreas están gestionando. También agregar que en la comisión de SAE somos casi todas las personas del Consejo Escolar y tenemos un buen vínculo que hace que las cosas funcionen. Tiene que haber un eje en la resolución de los problemas de las comunidades educativas, un eje en los derechos de los jóvenes de nuestro municipio y siempre priorizar eso frente a algunas disputas menores. Tenemos diferencias de criterios, de eso no hay dudas. Pero hay temas que resolver y para eso se necesita tiempo de trabajo de todos y todas.
– ¿Cómo es la relación con el municipio de General Pueyrredon?
La verdad es que yo no la veo. Por un lado no sabemos en qué se usa el fondo de financiamiento educativo. Hay una comisión de seguimiento que no es convocada. En 2021 llegaron más de $700 millones de fondo educativo que no sabemos a dónde van, si están llegando a las escuelas municipales. En las provinciales no aparece. Podemos coordinar con algunos organismos en situaciones puntuales pero no vemos la presencia. También se genera una desigualdad en la alimentación entre escuelas municipales y provinciales. Más allá de la doble prestación que está dando la Provincia, la inversión en alimentación de las escuelas municipales es mucho menor. En la pandemia el aporte local no existió y la Provincia lo suplió con los módulos. Esto es importante en una ciudad con altos niveles de desocupación, de informalidad. Durante la pandemia mucha gente sufrió por eso. Entonces el Municipio debería acompañar más a las escuelas a su cargo y tener presencia en las instituciones provinciales coordinando con el Consejo Escolar.
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