Juan Cingolani, docente, investigador y extensionista de la Facultad de Psicología de la Universidad Nacional de Mar del Plata presenta el Programa de Intervención Psicosocial para Adolescente (PIPs-A), adaptado a la situación de aislamiento social por el COVID-19. El proyecto se lleva a cabo mediante su página web: www.pips-a.com/covid19, donde se comparten recursos y testimonios de adolescentes en tiempos de cuarentena.

Escuchá la entrevista completa en el siguiente link.

— Contanos un poco del proyecto y cómo surgió.

Nosotros habíamos empezado hace mas de diez años a trabajar en relación a la población adolescente, nos acercamos a muchos adolescentes para poder tener datos empíricos de cuales eran las características que definían y acompañaban a los jóvenes en la ciudad de Mar del Plata. De ahí derivo nuestro trabajo inicial de diseñar un programa orientado específicamente a la promoción de salud.

En aquel momento la propuesta estuvo dada a partir de cuatro módulos distintos en los cuales trabajábamos distintas cuestiones que abarcan el desarrollo de cualquier persona, pero orientado a la población adolescente. El primer modulo trabajábamos competencias y habilidades que tienen que ver con el afrontamiento. Luego el segundo modulo está ligado a las emociones, poder identificar y conocer cuales son las emociones que van teniendo. El tercer modulo se refiere a habilidades sociales en la comunicación. Y por ultimo trabajamos en el eje, que da cuenta en la identidad y la autonomía de los adolescentes. Esto que surgió como una propuesta de intervención ligada la investigación  que llevamos adelante en el ámbito educativo, ese fue el origen de la propuesta.

— ¿Cómo se transformó y adaptó el proyecto?

Cuando este año aparece esta pandemia fue una invitación, una posibilidad de repensar lo que veníamos haciendo. Ya estábamos comprometidos con diversas instituciones donde íbamos a llevar la propuesta y con esta situación nos vimos imposibilitados de ir, pero eso no nos desmotivó con respecto a qué podíamos ofrecer. Con el equipo lo que nos permitió es desarrollar esta propuesta que ya estaba en formato presencial, tratamos de habilitar un espacio de acompañamiento de escucha y contención, fundamentalmente para no perder nuestro objetivo que es estar cerca de las y los adolescentes en relación a la promoción de salud.

Intentamos a partir de nuestra página formar un dispositivo especifico orientado al COVID-19, donde lo que facilitamos ahí es alguna de las herramientas que nosotros trabajamos en los talleres presenciales. Ahora las habilitamos para que los adolescentes puedan bucear, conocer, facilitamos algunos textos y recursos. Y partir de ahí la posibilidad de que ellos puedan compartir sus experiencias en relación a algunas preguntas.  

Nos encontramos también con mucha participación de docentes, se apoyan en esta herramienta para poder compartirla con sus estudiantes. Esto es como un aporte desde el cual compartimos algunos lineamientos para comprender mejor esta situación.

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