Según el relevamiento nacional de jóvenes de entre 15 y 29 años, realizado por el equipo de investigación “Apostar No es un Juego”, el 38% ha participado o participa activamente de las apuestas online. A su vez, cerca del 25% de los apostadores invierte más de una hora diaria en dicha actividad.

El equipo de investigación “Apostar No es un Juego” realizó un relevamiento, entre mayo y julio de 2024, con el objetivo de describir la penetración del hábito de apuestas online entre adolescentes y jóvenes de 15 a 29 años de Argentina. El muestreo cuenta con más de 9 mil casos de las 24 jurisdicciones y 360 localidades del país, en un trabajo conjunto con universidades, ONGs vinculadas a la juventud, organizaciones civiles y partidos políticos.

Del informe, presentado en septiembre de 2024, se desprende que casi la totalidad (94,9%) de los adolescentes y jóvenes escucharon hablar sobre apuestas online y que el 38% ha participado o participa activamente. Entre los apostadores regulares, destacan varones; personas de 25 a 29 años; personas que no están cursando estudios; con máximo nivel educativo terciario; económicamente activos y personas ocupadas.

Si bien el 58,7% de los jugadores declaró dedicar menos de 1 hora por día a la actividad, hay un 13,9% que dedica entre 1 y 2 horas diarias, y un 12,7% de apostadores que le dedica más de 4 horas por día.

Los investigadores resaltan la percepción de aislamiento de quienes no participan del hábito, la sensación de “quedarse afuera del grupo” o “sentirse un boludo” por no apostar. Además, la falsa percepción de un “otro” que supuestamente es ganador, tal como refleja uno de los testimonios: “Cuando los chicos pierden no lo cuentan por vergüenza y de ahí es que parece que ganan mucho; sólo se habla de lo que se gana”. Al respecto, el psicólogo Agustín Dellepiane, especialista en la problemática, refiere al sesgo de confirmación que lleva al apostador sólo a ver y contar las veces que gana, las cosas que logró con ese dinero.

Por otro lado, 6 de cada 10 apostadores consideran que es poco o nada lo que han perdido. Federico Pavlovsky, médico psiquiatra especialista en consumos problemáticos, apunta al respecto que la forma virtual de jugar en estos sitios contribuye a la pérdida del dolor de pagar. El apostador no siente que esté perdiendo dinero sino que solamente está jugando. Pagar físicamente duele porque uno hace tangible la pérdida y en el cerebro se activan las mismas zonas que registran el dolor físico.

Publicidad y auspicios en el ámbito deportivo

Un estudio de la Defensoría del Pueblo de la provincia de Buenos Aires reveló que 12,5% de jóvenes de entre 15 a 25 años apostaron online alguna vez, cifra que asciende al 15,5% entre las personas de 25 y 34 años. La investigación, anclada en el territorio bonaerense, muestra que el 10,1% de los apostadores juega todos los días de la semana, mientras que el 25,7% lo hace entre dos y seis veces. Las opciones más elegidas para apostar están vinculadas al fútbol (41,2%), al bingo (37%) y al boxeo (16,8%).

Los datos no podrían causar sorpresa cuando, según el mismo estudio, tanto la Liga Profesional de Fútbol como el 28% de los equipos de primera división, cuentan con publicidad de casinos online, al igual que las transmisiones de los partidos y los portales informativos.

Ante esto, según señalaron desde Fundación Encuentro: “A los efectos de establecer un marco preventivo frente a la ludopatía digital en jóvenes, se presentaron 27 proyectos de ley en la Honorable Cámara de Diputados de la Nación. Tras diversas jornadas de debate con más de 150 legisladores y especialistas de la sociedad civil, la mayoría de los bloques consensuaron la redacción de un texto unificado que logró obtener dictamen de mayoría en un plenario de comisiones y luego obtener la media sanción en el recinto”.

Dicho proyecto, denominado «Ley de prevención de ludopatía y regulación de juegos de azar y apuestas en línea», obtuvo la media sanción en noviembre de 2024 y establece la prohibición de publicidades de casas de apuestas virtuales en todos los medios, plataformas digitales, contenidos de influencers y hasta en las camisetas de fútbol. A su vez, prevé la prohibición con datos biométricos del acceso a los sitios de apuestas para menores de 18 años.

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