En las últimas horas, saquearon una escuela del barrio Felix U. Camet, tras ingresar un grupo de delincuentes violentando la reja de una ventana. Se llevaron desde artefactos tecnológicos de valor hasta alimentos y ropa.
Una vez más, la delincuencia en Mar del Plata no reparó ni en los daños económicos ni sentimentales de las víctimas. Este martes a la mañana, las autoridades educativas de la Escuela Primaria N° 17 y la Secundaria N° 217 descubrieron un violento robo en las instalaciones, ubicadas en Isla Candelaria al 600. Tras constatar los faltantes, se realizó la denuncia correspondiente en la comisaría decimoquinta y ahora se investiga cuándo se produjo el hecho.
El Director de la Escuela Secundaria, Francisco Barreiro, proporcionó a Trama Educativa fotos del vandalismo y robo generado en el edificio. Además, nos dio detalles de las consecuencias: «Nos dejó perplejos esta situación de inseguridad generalizada. La escuela no deja de ser víctima de los delitos que están ocurriendo cada vez más. Particularmente, en nuestro barrio, están sucediendo otros hechos similares. Hemos estado analizando con los vecinos que estamos un poco solos porque no hay respaldo de un dispositivo de seguridad que sea, por ejemplo, rondines frecuentemente, presencia policial, más móviles».
Informó que, según dichos de los encargados de la comisaría donde radicaron la denuncia por robo, «están escasos de recursos»: «Estamos un poco complicados. Suceden estas cosas, muy lamentables. Lo más triste es por qué tanto ensañamiento contra la escuela. En este último tiempo, la escuela vino haciendo un trabajo mancomunado, solidario, con todos los chicos, presentando y trabajando en un ropero comunitario para las familias del barrio. Trabajaron en la elaboración de jabón líquido, siempre pensando en la solidaridad. No solo robaron equipos de audio, computadoras, televisores, sino también hicieron destrozos muy feos, llenadas de pintura, rociado con el polvo de los matafuegos, rotura de vidrios. Indescriptible la situación», describió.
El Director de la Secundaria N° 217 duda si esto se debe a que «se han instalado en el barrio nueva gente, nuevas familias, que están tratando de reacomodar su situación, su ubicación en el barrio». Por otro lado, también consideraron la problemática del «encierro permanente, la falta y escasez de recursos, cómo sobrevivir».
Por último, Francisco Barreiro dijo: «Es una caída muy grande, ahora vamos a tener que aunar en muchos más esfuerzos entre el personal docente, los vecinos, la gente que quiera colaborar, para seguir adelante, reconstruir todo».
