En Trama Educativa Radio hablamos con el cuerpo directivo de la Escuela Amuyen, jardín, primaria y secundaria, sobre el cierre del 2022 y la propuesta pedagógica para el próximo año. Además, nos comentaron sobre la modalidad de trabajo de la cooperativa en los distintos niveles educativos.
-Susana, hablando del jardín, ¿cuáles son las diferencias de un colegio público o privado con Amuyen?
Nuestro proyecto educativo apunta a integrar y sumar a las familias, por eso está la participación y la invitación a compartir con los niños y niñas diferentes actividades. Por ejemplo talleres cooperativos, que si bien son dentro del horario en jardín y están dentro del proyecto educativo, hay momentos en los cuales las familias comparten las dinámicas de taller para también vivenciar de que se trata.
Una vez por semana se le plantea a los chicos diferentes propuestas, son cuatro talleres coordinados por tres docentes de sala y la preceptora y cada día ellos tienen que elegir que taller quieren realizar. Entonces se encuentran por gustos y también comparten con niños y niñas de otras salas.
Se forman cuatro grupos heterogéneos en edades pero unidos por la misma elección de afinidad. Los fortalece muchísimo porque aprenden a elegir y además a relacionarse, para vincularse con otros pares y otros adultos de la institución porque se van conociendo todos.
Los talleres son variados en las temáticas. Puede ser de teatro, de cocina, de máscaras y de móviles. Pero si están en juego las distintas herramientas para relacionarse, vincularse, expresarse, elegir y lograr el producto del taller, porque hay una ayuda entre sí junto con el docente y comparten y disfrutan mucho.
-Ese es un gran diferencial con respecto a otras instituciones educativas ¿Creen que también es uno de los factores que hace que crezcan su alumnado?
Es uno de los factores, la escuela es de puertas abiertas y desde lo que son las distintas herramientas, brindamos posibilidades para que se expresen. A través de la palabra, por ejemplo es un recurso que se utiliza en el nivel primario también, las rondas. Las rondas como una modalidad de trabajo en cuanto a la posibilidad de expresarte a los demás.
En jardín nosotros utilizamos un elemento que es el muñeco que da la palabra para que aprendan a que hay momento para poder hablar, que si no tenemos ganas pasamos el muñeco pero también se va construyendo una manera de escucha. Porque ese muñeco circula en la ronda y cuando llega a las manos de quien habal, el objetivo es justamente aprender a tener el lugar para hablar y también escuchar a los demás.
-Sandra, ¿hay una continuidad entre lo que es la propuesta del jardín y lo que es la propuesta del colegio primario?
Amuyen significa ir por el camino con el otro y ese ir por el camino con el otro implica un montón de cuestiones que tienen que ver con una construcción con el otro también. Construimos acuerdos, construimos conocimiento, hacemos circular ese conocimiento.
También tiene que ver con la forma de trabajo compartida en una mesa, entre los estudiantes. Esa modalidad es transversal en nuestra escuela, desde inicial, primaria y después en secundaria donde los chicos aprenden desde las diferencias que encuentran entre sus compañeros en esa misma mesa, no solamente a compartir un material de trabajo si no también las distintas ideas que van surgiendo a través de las distintas propuestas que da el docente.
Esas discusiones bien entendidas que se producen en los grupos, las puestas en común, las conclusiones con el maestro como guía. No es un maestro que se ubica adelante y da una clase si no, que es un maestro que acompaña y conoce a cada uno de los integrantes de su aula. Las familias también forman parte y es transversal en toda la escuela. Las familias son partes de nuestra querida escuela Amuyen. Los hacemos partícipes en todo más allá de que nosotros pertenecemos a la Cooperativa Tierra Nueva.
-Mariela, vicedirectora de primario, respecto de la cooperativa que conforman los y las estudiantes, ¿en qué consiste?
La cooperativa de los chicos y chicas del nivel primario es la cooperativa Caryay Mitaí, que significa jóvenes niños. Esta cooperativa funciona y tiene los mismos miembros que la cooperativa de los adultos que organizan la escuela y también eligen a sus representantes.
Dentro de la cooperativa funcionan los talleres cooperativas de primaria. De primero a sexto. Donde los chicos también elijen sus talleres, proponen, esta la asamblea de primaria, los talleres son autogestionados por ellos, y deciden que puedo hacer. Hay una variedad de talleres de acuerdo a lo que ellos proponen y a lo que el docente puede acompañar en esas propuestas.
Siempre la idea y oportunidad es de conocerme con otros, acompañarme en ese taller, y brindar todo eso que puedo aprender con el otro. A raíz de esos talleres ellos mismos, con el docente que acompaña, deciden que hacen con lo que se produce, si se vende, no se vende. Y que se hace con ese dinero toda esa autogestión surge del mismo taller.
-Adrian, ¿hay problemas en el secundario? O es como cuentan las chicas que participan, que son autónomos y organizan su propia agenda
Es en la misma línea que contaron mis compañeras. La continuidad de los talleres da la posibilidad de que los estudiantes puedan agruparse de acuerdo a sus afinidades dentro de esos talleres. Es cierto que hay talleres que son propuestos por ellos y son viables, aparece esta elección involuntaria y talleres que la escuela mantiene fijos en su propuesta.
Uno de ellos es el taller de banda. Hay que aprender a ser paciente, tolerante. Cuando hablamos de hacer una puesta en común también hay que aprender que algo se cede y en los más grandes es todo un desafío de trabajo.
-Me imagino que hay que educar a los padres y a las madres en este sentido. ¿Cómo trabajan con los padres en esta educación?
En los departamentos de escuela asisten los padres representantes de cada curso y son espacios de formación también. Donde se debaten posturas y decisiones de porque se hace de esta forma y ellos son voceros con sus pares de esta situación. Frente a cualquier cosa se remite y se alienta que se venga a la escuela. Es un trabajo permanente de formación porque para mantener un proyecto quienes tienen que vigilado y dar cuenta de él no solamente somos los directivos, si no también los docentes, los padres y los chicos y chicas para que esto permanezca en el tiempo.
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