La Fundación Bunge y Born lanzó el Desafío Domo Cósmico para instalar 100 de estos juegos en distintos puntos del país. La convocatoria, dirigida a escuelas públicas y privadas de nivel inicial y organizaciones civiles que trabajen con niños de 2 a 6 años, estará abierta hasta el 4 de julio.
El Desafío Domo Cósmico invita a escuelas de nivel inicial, públicas y privadas, y a organizaciones de la sociedad civil de todo el país, a participar por un juego de patio diseñado especialmente para estimular la educación en la primera infancia. Esta convocatoria, impulsada por la Fundación Bunge y Born, estará abierta hasta el 4 de julio y tiene como finalidad instalar 100 domos cósmicos en distintos puntos de Argentina.
Para completar el formulario, las escuelas interesadas deben estar inscriptas en el Padrón Oficial de Establecimientos Educativos de la Secretaría de Educación de la Nación. En tanto, las organizaciones de la sociedad civil -merenderos, clubes, comedores, hogares, entre otras- deben tener una antigüedad mínima de 5 años y una trayectoria de 2 años o más en actividades y proyectos destinados a niños de entre 2 y 6 años de contextos vulnerables. También, contar con un espacio disponible para la instalación del domo y con las habilitaciones correspondientes para el desarrollo de las actividades declaradas.
El domo cósmico tiene como objetivo potenciar el tiempo de recreo para contribuir al desarrollo de habilidades cognitivas y motrices identificadas como precursoras del aprendizaje. Estas son: identificación de emociones, atención selectiva, memoria de trabajo, control inhibitorio, flexibilidad cognitiva, planificación, conciencia fonológica, memoria de largo plazo, sentido del número, coordinación visomotora y motricidad.
Según detallaron, está basado en evidencia científica y creado por un equipo conformado por diseñadores industriales, terapistas ocupacionales, neuropsicólogos, y especialistas en desarrollo infantil y educación. El premio incluye un manual con más de 60 actividades y un curso intensivo para potenciar el uso de esta herramienta.
Esta iniciativa surgió a partir de un relevamiento realizado por la Fundación Bunge y Born en 2017 y 2018, en colaboración con el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, el cual abarcó inicialmente a 759 establecimientos educativos de 22 provincias y, en una segunda instancia, incluyó una encuesta presencial en 330 escuelas para profundizar en sus características y necesidades.
Uno de los hallazgos más significativos fue la carencia de juegos de patio en más de un tercio de las escuelas, limitando así las oportunidades de los niños para participar en actividades lúdicas durante los recreos. En aquellas escuelas que contaban con juegos, la infraestructura se limitaba a hamacas, toboganes y subibajas, los cuales solo estimulan la motricidad gruesa y el sistema vestibular, dejando de lado otras habilidades cruciales para el desarrollo infantil.
El director ejecutivo de la Fundación Bunge y Born, Gerardo della Paolera, detalló: “Este juego de patio ha sido especialmente pensado para aumentar las habilidades cognitivas y motrices de niñas y niños. Fue un trabajo de cuatro años, en los cuales, instalamos primero los domos en Mendoza e hicimos una evaluación y una capacitación de los docentes que utilizan este juego”. Y concluyó: “Son las acciones colectivas con las que podemos salir todos adelante”.