Trama Educativa entrevistó a Walter Buceta, integrante del equipo de gestión de «La Estación», sobre los ejes de trabajo de este nuevo espacio creado a fines del mes de julio.
«Somos un espacio abierto de participación. Una comunidad de ideas, proyectos y con una agenda con páginas en blanco para que la completes vos», así se describen los miembros de «La Estación» en sus redes sociales. Una comunidad joven, un espacio de encuentros, de recibimientos, de inicios, para innovar, proyectar, idear.
- ¿De qué se trata «La Estación»?
«La Estación» refleja una idea que venimos trabajando hace un tiempo, con compañeros y compañeras con quienes compartimos algunas visiones. Intenta ser un espacio creativo, de participación, de ideas y proyectos. Nuestras dimensiones es fomentar una comunidad, donde la creatividad, la participación, el debate, la propuesta de ideas y proyectos se puedan plasmar en iniciativas concretas.
Por supuesto, el contexto que estamos viviendo hace que toda aproximación sea virtual, pero la idea de «La Estación» es crear un espacio multicultural, heterogéneo, abierto, donde se desarrollen varias iniciativas, vinculadas a algunos ejes en particular, con la intención de que haya un espacio para todas las miradas, para todos los que tengan algún interés de discutir y de avanzar en la puesta en marcha de iniciativas concretas.
- ¿Por qué surge «La Estación»?
Porque muchos de nosotros y nosotras entendíamos que hay en la sociedad, y puntualmente de Mar del Plata, un espíritu y una necesidad de vincularse con los temas que nos preocupan, desde diferentes aristas.
Entendíamos que hoy, sobre todo las juventudes, se ven tal vez convocadas a participar a iniciativas que respondan a intereses concretos que los jóvenes y las jóvenes tienen. Entonces, creíamos que hacía falta un espacio heterogéneo, amplio, donde se pueda participar desde distintas miradas, políticas, institucionales, históricas, pero si un espacio donde se pueda trabajar los intereses particulares de cada uno. Acercándonos con preocupaciones comunes, muy cotidianas, chicas en principio. Necesitamos generar una comunidad nueva, donde se pueda acercar quien quiera, donde se puedan acercar ideas, proyectos, inquietudes, donde se puedan encontrar en comunión con otras personas que nos identifiquemos con las mismas preocupaciones.
- ¿Cuáles son los ejes de trabajo de «La Estación»?
Para nosotros y nosotras, hay tres ejes o tres andenes, que nos gusta decir, porque es «La Estación», que de alguna manera deben cruzar toda el trabajo, el encuentro, el inicio. Tienen que ver con lo medioambiental, una preocupación muy latente, muy en la piel, sobre todo de las nuevas generaciones, vinculado con el desarrollo sustentable, los hábitos de consumo, la responsabilidad cotidiana de cada uno de cuidar nuestro único planeta; con los feminimos y disidencias, creemos que si hubo alguna revolución social tiene que ver con la cuestión feminista y nos parece bien, avanzar en eso; y por otro lado, está relacionado con una manera de pensar, de buscar soluciones nuevos a problemas nuevos y antiguos, es decir, la innovación, como metodología de pensamiento. Aquí se involucran toda la cuestión autogestiva, los emprendimientos productivos, culturales y educativas, la innovación de la dinámica de grupo, la innovación en la puesta y funcionamiento de un proyecto, la innovación en proyectos sobre feminismo y disidencias, con medioambiente.
Después, hay algunos ejes o algunos canales a través de los cuales tenemos pretensiones de abordar, como la solidaridad, la participación, lo cultural que para nosotros es muy importante, pero siempre como canales para trabajar con estos tres ejes que cruzan todo el trabajo.
- ¿Por qué se llama «La Estación»? ¿A dónde está enfocado el nombre?
Se llama «La Estación» porque arribamos a ese nombre como símbolo de un lugar. Nosotros y nosotras nos imaginación una estación donde se cruzan generaciones, donde se reciben personas que vienen a desarrollar sus proyectos, ideas e inquietudes, pero también se despiden a quienes van a disfrutar, a concretar sus sueños; también se despide lo que está mal o ya no gusta. En un andén de una estación, creemos que se encuentra el artista que está ofreciendo su arte, la persona que abraza a un familiar que llegar, la persona que despide a un joven que va en busca de sus sueños, donde recibimos un tren o un micro lleno de ilusiones y de valijas, pero también despedimos al que se va.
«La Estación» es multicultural, multigeneracional, donde de alguna manera se mezclan las realidades sociales, las iniciativas, las inquietudes, es un lugar de recibir personas, de abrazar de emocionarse. También está el cafecito en la esquina de la estación, donde uno se puede sentar a charlar y debatir, mientras espera. Entonces nos parece que de alguna manera simboliza esa cosa multicultural, heterogénea, al lugar donde todos pueden llegar y pueden despedir. Nos parece que esa dinámica, ese movimiento donde fluyen realidades, simboliza lo que queríamos hacer en este espacio.
- ¿Cuáles son las actividades que piensan realizar de ahora en más?
Todavía estamos en etapa de darnos a conocer, que suene la sirena del tren para que la gente nos escuche. Estamos intentando todavía de manera virtual, para que nos conozcan, se acerquen, presentar de a poco los ejes de trabajo. Hace unos días, las compañeras que coordinan el eje de feminismo y disidencias empezaron a comentarle a la comunidad desde qué mirada se apunta el trabajo de este ámbito.
En los próximos días, estamos prontos a mostrar los demás ejes, mientras vamos intentando cumplir algunas actividades concretas. Posiblemente, este próximo domingo 16 de agosto, en el Día de las Infancias y la Niñez, también intentemos compartir ese momento con las familias, los amigos, la comunidad.
Tenemos previsto empezar a convocar a la comunidad, a que se unan a las distintas iniciativas vinculadas a lo medio ambiental, a los hábitos de consumo. También se está preparando un 2° Congreso de Medioambiente y sustentabilidad, a realizarse en el mes de octubre, que se llevó a cabo el año pasado vinculado con la Universidad Nacional de Mar del Plata, pero que de alguna manera se va a replicar con «La Estación».
Hay muchas ideas que nos entusiasman mucho, como un almacén de tiempo, donde la gente ponga a disposición de alguna manera su tiempo y se lleve el tiempo de otro, otra u otre para desarrollar proyectos. Muchas ideas tienen que ver con empujar, ayudar a difundir, desarrollar emprendimientos, proyectos, inventos, experimentos sociales.
Hay iniciativas muy lindas que desarrollan las compañeras de feminimos sobre divulgar material cultural de la cuestión que pueda ser de utilidad para el resto de las mujeres y disidencias, además de la información sobre políticas de cuidado y empoderamiento en las cuestiones socioeconómicas.
«La Estación» va a ser un lugar de charla, de talleres, de convocatorias. Lo central para nosotros es que se forme una comunidad, virtual, un lugar de referencia para jóvenes y no tan jóvenes, para quienes quieran acercarse, que se pueda lograr esa referencia con la comunidad y que se pueda sentir que en «La Estación» se puede proponer, que la agenda está abierta, eso para nosotros es crucial, es parte del sentido que le da «La Estación», saber que la agenda de actividades está repleta de hojas en blanco para que las complete la comunidad, para ir construyendo junto con las organizaciones y con las inquietudes que se vayan acercando.
Para comunicarse, pueden hacerlo a través de Instagram y Facebook como @laestacionmdq.