La Armada Argentina evalúa desprenderse de la Escuela Nacional de Pesca (ESNP), uno de los principales centros de formación de oficiales superiores de la Marina Mercante y del personal de los buques pesqueros.
La decisión de cerrar las puertas de la escuela se habría formalizado cuando Gustavo Adolfo Príncipi, Contraalmirante y Director General de Educación de la Armada, comunicó de manera verbal a los alumnos y personal de la institución que el cierre de la misma era inminente.
A raíz de lo sucedido, este lunes por la mañana se realizó una conferencia de prensa en el Club Talleres de Mar del Plata, donde gremios, directivos, docentes y alumnos se manifestaron en estado de “alerta y movilización” tras la decisión del Jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, Xavier Julián Isaac, de retirar la escuela de la jurisdicción de la Armada.
Mariano Moreno, secretario general del Centro de Patrones de Pesca, al ser consultado sobre si anteriormente les habían notificado esta decisión, declaró: “Nos dijeron que estaban estudiando alternativas, pero que no había nada concreto. Y si había alguna definición nos iban a avisar”. Sin embargo, el pasado viernes fueron notificados sobre el cierre de la ESNP.
La rueda de prensa fue encabezada por el Sindicato Conductores Navales de la República Argentina (Siconara), el Centro de Patrones y Oficiales Fluviales, de Pesca y de Cabotaje Marítimo, y el Sindicato de Obreros Marítimos Unidos (SOMU).
Mariano Vilar, secretario general de Siconara, subrayó que el cierre de la escuela ya no es una posibilidad, sino “un hecho”. Al respecto, indicó: “Días atrás el Contraalmirante Príncipi vino a decirnos que la escuela se cierra. Estamos convencidos de que esto es, en realidad, una privatización encubierta, sobre todo porque el título de patrón de pesca alguien lo va a tener que dar”.
La Armada Argentina esgrimió dos argumentos principales para justificar el cierre de la ESNP. El primero refiere a razones presupuestarias, señalando que el costo de mantenimiento de la escuela es de un millón y medio de dólares al año, lo que representa el 0,26% del presupuesto total de la Armada. El segundo argumento que presentaron fue la falta de necesidad, según la Armada, de seguir formando a civiles directamente vinculados al sector pesquero. Esta argumentación va en contra de las obligaciones establecidas en el artículo 1° de la Ley N° 22.392, que regula la formación de los oficiales de la marina mercante.
Los referentes gremiales expresaron: “Estamos totalmente en contra de esta decisión que está llevando adelante la Armada, la cual cierra las puertas a los trabajadores que ejercemos soberanía en altamar. Nosotros navegamos porque hemos podido estudiar en una escuela pública, accesible a las necesidades de los trabajadores”.
A su vez, los docentes y el personal civil de la institución realizaron una asamblea donde definieron tres puntos claves respecto a la situación actual del personal de la ESNP. El primer punto refiere a la incertidumbre de qué va a suceder con los docentes y el personal civil, a partir de las declaraciones de Príncipi respecto al cierre de la escuela.
El segundo punto de preocupación está relacionado con la infraestructura, ya que no se sabe qué ocurrirá con el edificio donde actualmente se dictan las clases, ni con la embarcación utilizada para las prácticas de los aspirantes a oficiales. Ambas instalaciones, tanto el edificio como el buque de instrucción, fueron donadas por el Gobierno de Japón.
Por último, el tercer punto habla de la situación de los estudiantes. Existen dudas sobre lo que ocurrirá con aquellos que actualmente están cursando y con quienes se inscribieron para comenzar su formación. Si bien la Armada ha garantizado la titulación de los estudiantes que terminan este año, no está claro qué sucederá con los alumnos que requieren continuidad en su formación.