En una entrevista para el programa radial “Con Vos” la ministra de Educación de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Soledad Acuña, habló sobre la decisión de volver a las aulas sin burbujas y los nuevos protocolos tras el receso invernal.
Según los datos presentados por la ministra, serían alrededor de 90.000 chicos los que volvieron a las aulas luego del receso invernal, sin la aplicación de las burbujas. “Obviamente esto genera muchas sensaciones a las familias, sobretodo a quienes no están dentro de las escuelas y no ven la organización que hay adentro” explicó Acuña, frente al descontento de padres y sindicatos ante la decisión tomada. La medida de retirar las burbujas habría sido tomada luego de varias reuniones con expertos en distintas áreas, quienes dispusieron que la situación epidemiológica era favorable como para poder acceder a una presencialidad masiva en las escuelas.
Respecto de la ventilación cruzada en las aulas, afirmó que las escuelas que no cuentan con este requisito, disponen de purificadores, hasta el momento hay más de 1300 de estos equipos instalados en las aulas. Por otro lado, las instituciones que no cuentan con ventilación cruzada ni tampoco purificadores, están a la espera de ser habilitadas para el dictado de clases.
Sobre la decisión de no poner medidores de dióxido de cloro, Acuña explicó que fue una decisión tomada acorde a la efectividad y la posibilidad de habilitar más escuelas. “El detector lo único que hace es decirte si el ambiente está oxigenado o no y tenés que abrir las ventanas. El purificador lo que hace es mantener el ambiente seguro todo el tiempo.”
Si bien la decisión de exceptuar a los alumnos que están dentro de los grupos de riesgo o que presenten familiares dentro de estos grupos, la ministra confirmó que no están recibiendo clases virtuales, sino cuadernillos con el contenido asignado. “La noticia es que los chicos que comenzaron exceptuados hoy los médicos están recomendando que vayan a las escuelas, porque es preferible que estén en la escuela a perder un año de escolaridad, lo cual nos ha disminuido muchísimo la cantidad de chicos que están exceptuados” Explicó Acuña, afirmando que antes de las vacaciones de invierno eran apenas un 3% del total de los chicos de todos los niveles, quienes no concurrían a las instituciones educativas por estar exceptuados.
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