En Trama Educativa Radio hablamos con Federico Cermelo, director del Observatorio de Familias y Juventudes de la Honorable Cámara de Diputados de la Nación, sobre el trabajo del observatorio y cómo la Educación Sexual Integral ayudaría a prevenir el grooming y el bullying.
-¿De qué se trata el Observatorio de Familias y Juventudes?
Es un área dentro de la Cámara de Diputados de la Nación que, de alguna manera, realiza tareas de asesoría y técnica para las comisiones y los legisladores. Haciendo informes, relevando datos, proponiendo actividades, para instalar una agenda parlamentaria. Muchas veces hacemos de puente con la sociedad civil que busca presentar un proyecto de ley o participar de un debate parlamentario. Por ejemplo, hemos realizado actividades cuando se debatió la Ley de Educación Ambiental, la ley Yolanda, propiciando que colectivos juveniles, educativos y ambientales puedan ser parte del debate. También generamos actividades de extensión fuera del congreso. Somos invitados por facultades, escuelas y demás, en donde vamos y muchos de estos temas que trabajamos puertas adentro los adaptamos a talleres o a charlas para poder brindarlos a la comunidad.
-¿Cómo se encargan del tema del grooming en el Observatorio?
Cuando comenzamos nuestra gestión, principios del 2020, al poco tiempo tuvimos la pandemia. Uno de los colectivos que se comunicó con nosotros fue mamás en línea, que está integrado por madres y padres cuyos hijos han sido víctimas de ciber acoso, y ahí nos hicieron llegar que ya a los 2 o 3 meses de empezar la pandemia, tenían estadísticas de que el delito del grooming, que es el acoso virtual de una persona mayor de edad a una menor de edad, había aumentado en un 50%. Por lo cual empezamos a investigar y lo que encontramos es que el grooming, simplemente, es un inciso del código penal hace 10 años más o menos y creíamos que el Estado tenía que hacer algo más. Por eso de manera virtual, como funciono el Congreso en ese momento, empezamos a realizar conversatorios, vinieron legisladores, se empezaron a trabajar ministerios, empezó a armarse una bola re grande con personas del Estado y la sociedad civil y eso derivo en un proyecto de ley que es una campaña permanente de capacitaciones que se aprobó por unanimidad y hoy la CENAF, la está reglamentando.
-En esas actividades que nos estaban contando, ¿realizan jornadas en instituciones educativas?
A nosotros nos pasó que cuando comenzamos con el observatorio algo que yo plantee fue que el observatorio tenía que tener redes sociales. Porque yo quería que el trabajo que hacemos puertas adentro del Congreso sea aprovechado por la comunidad, no que sea un insumo para legisladores o comisiones. Eso generó que a partir de todos estos temas que empezamos a trabajar nos empezaron a contactar muchas escuelas que dicen que no se habla de esto. No se habla de grooming, no se habla de bullying, ni siquiera se habla de educación sexual integral. Entonces empezamos a armar equipos para poder hacer frente a esa demanda. Yo soy de Mar del Plata y mis compañeros también, y por suerte en Mar del Plata podemos dar una mayor cobertura de la que podemos dar en otros lugares, porque nos escriben de todas partes del país. ´
Hemos tomado el compromiso de que a cada escuela que nos escriba, en la medida que los tiempos nos dejan, vamos. Lo hacemos porque creemos que es lo que hay que hacer, porque si te escribe un docente o un director para decirte que hay un caso de bullying y que nadie del Estado baja a dar una mano con eso creemos que es una obligación, ir, escuchar y tratar de dar una mano en ese sentido.
-¿Las escuelas no están implementando al 100% acciones en función de la ESI?
El problema de la ESI es que es una ley que tiene 16 años, pero el texto deja que cada escuela lo adapte según su parecer. Esto hace que algunas escuelas lo apliquen bien, otras más o menos, y otras mal. Esto es muy grave porque si la ESI se diera, entre sus ejes esta la prevención de delitos sexuales, es decir se podría prevenir el grooming, y también está el tema de la valoración de las afectividades y el respeto de las identidades, por lo tanto, contribuiría también al bullying. Pero no solamente eso, acá en Mar del Plata, se presentó hace algunos años durante la gestión de Arroyo, educación sexual en un clic que fue aprobada por unanimidad que el intendente Arroyo vetó, y que luego el Concejo Deliberante la promovió de nuevo y la aprobó, y todavía durante la gestión de Montenegro no se está cumpliendo. Era generar un dispositivo móvil, a través de una red social, de un número telefónico, de un chat online, para que cualquier alumno o persona que tuviera una duda de salud sexual pudiera consultarse. Ya que en las escuelas no lo dan, que sea una obligación del municipio.
Esto a nivel nacional existe, hay un programa hablemos de todo, hay una línea del Ministerio de Salud, y queríamos que Mar del Plata tenga eso. Lamentablemente ni el intendente Arroyo ni Montenegro les ha preocupado este tema y hoy Mar del Plata es una ciudad que tiene 800.000 habitantes y que no tiene un dispositivo para atender a la salud sexual de las juventudes y de la familia.
-¿Vos crees que desde el trabajo que viene desarrollando la Cámara de Diputados de la Nación, más los gremios, más los directivos, puede llegar a mayor cantidad de jóvenes para tomar la verdadera dimensión de estas problemáticas?
Yo creo que sí, la mayoría de los docentes está de acuerdo. Pero primero los que están de acuerdo y lo están pidiendo son los chicos porque, en general, a nosotros nos escriben centros de estudiantes y vamos a una escuela y a veces genera un conflicto entre los chicos y los directivos. Los chicos manejan otro lenguaje otras necesidades que a veces las poblaciones adultas no están viendo. A los pibes les preocupa que no haya ESI, les preocupa la salud mental, la violencia, les preocupan un montón de temas y a veces los docentes están desactualizados. Nosotros a veces encontramos docentes que dan biología y la verdad que no están actualizados para poder dar ESI y eso es una diplomatura de 3 o 4 meses. Es un trabajo que requiere voluntad política y sindical para llevar las capacitaciones a los docenes, a los directivos de las escuelas y exigir que eso se cumpla.
En los lugares donde más se cumple con la ESI hay alguien detrás que vela por hacer de puente y de nexo. Yo creo que Mar del Plata hoy no está contando con esa voluntad política para que la ESI o esos temas que afectan a los jóvenes estén en el centro de la escena. Para que las salitas donde va la gente de Mar del Plata, la salud sexual, la violencia familiar, el grooming, la ciudadanía digital, sean temas en donde los adultos estén empapados para que puedan recepcionar las cosas de la juventud.
-Muchas veces, por parte del resto de la comunidad, se minimizan estas situaciones que están sucediendo en instituciones de todo el país
Lo peor que podemos hacer es bajarle el precio al bullying y verlo como un problema de chicos. El bullying es un problema de adultos porque sucede a los ojos de adultos. Con respecto a la escuela, nosotros lo veníamos alertando hace tiempo, cuando uno deja a un menor en la escuela, la responsabilidad legal por su integridad es de la escuela. Por lo cual, si un chico sufre un accidente la responsabilidad legal recae en las autoridades de la escuela. Lo peor que puede hacer la escuela es mirar para el costado si hay casos de bullying. Por eso digo, se requiere una voluntad política desde el Estado, sindicatos, y demás, para prestarle atención al tema y trabajarlo en serio. A veces se puede trabajar en serio con los elementos que tenemos.
Apliquemos la ESI que tiene 126 años, que significa respetar a las identidades y las diversidades, que los funcionarios municipales pongan el tema en el centro de la escena, hablen de eso en sus redes, generen dispositivos en el municipio, para el caso municipal, provincial y nacional. No inventemos cosas nuevas. Argentina tiene un montón de leyes, a veces necesitamos que los instrumentos que se persiguieron, se lucharon y se conquistaron, como fue la ESI o el aborto, se pongan en el centro de la escena, se les muestre a las juventudes y los concienticemos para que se cumplan.
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